Estas palabras del apóstol Juan expresan la
profunda alegría y satisfacción que siente un padre ante los logros de sus
hijos, y el gozo se acrecienta mas, cuando esos logros son espirituales y
producto de sembrar a temprana hora
valores espirituales.
Traigo esto a colación a propósito de la
presentación de la PRODUCCION MUSICAL de
NUESTRA hija MIRENNY ALEJANDRA REYES PATIÑO (MIRITA REY) este 07 de
julio de 2012 en Valencia.
Llegar a este momento ha sido un proceso. Desde
muy chica ella sintió inclinación hacia el arte del canto. Recuerdo las horas
que pasaba con ella ensayando canciones infantiles y grabándolas con un pequeño
radio reproductor que enrollaba la cinta. A todas les gustaba participar en
estos ensayos que muchas veces terminaban en riñas y yo tenía que suspender la
grabación porque no podía controlarlas. Aun conservo cassette de esos momentos.
Mis cuatro hijas todas participaron en los
festivales que se realizaban en la iglesia. Dos de ellas, renunciaron y no
quisieron participar más. (Emmis y Liz)
Henny y Mirenny, si fueron perseverantes y
siguieron participando en festivales, coros infantiles, corales y otros eventos
más, tales como festivales en la universidad
No ha sido un trabajo de unos cuantos años o
producto de emociones pasajeras, ha sido algo de toda una vida.
Hoy me llena de satisfacción este logro que estoy
seguro glorifica a Dios y va edificar muchas vidas.
Lo que se trata de promocionar aquí no es la
persona de MIRITA REY, sino un ministerio que tiene como propósito la conquista
y salvación de las almas. Sus propias canciones tienen un contenido
profundamente evangelístico y de motivación a la iglesia a involucrarse en el
plan divino de salvación.
Este primer concierto es el inicio de un camino
muy largo donde seguramente vendrán muchas dificultades, pero es necesario que
asi sea. Llegar al otro lado del rio no es fácil; demanda una cuota de
sacrificio, pero al igual que ayer, la presencia de Dios no se hará esperar
para enviar su nube y su antorcha para guiarla por lo mas escarpado del camino. Y al final
celebrar la fiesta de la pascua como símbolo de la victoria y la libertad.